13/11/09

Pensamiento de San Alberto Hurtado sobre el Amor

Viernes 13 de Noviembre del 2009, Año Sacerdotal


«Yo sostengo que cada pobre, cada vago, cada mendigo es Cristo en Persona que carga su Cruz, y como a Cristo debemos amarlo y ampararlo, debemos tratarlo como hermano, como un ser humano, como a nosotros. Si todos iniciáramos una campaña de Amor hacia el indigente, terminaríamos en corto plazo con los espectáculos deprimentes de la mendicidad callejera, de los niños durmiendo en los quicios de las puertas y de las mujeres que desfallecen con sus niños en brazos» (San Alberto Hurtado. Mayo de 1949. Ercilla, Chile).


Fuente:

http://www.hogardecristo.com/p_hurtado/vida.htm



Comienza el día

Viernes 13 de Noviembre del 2009, Año Sacerdotal


Empieza este día con tu corazón rebosante de Amor...

Alegría y agradecimiento... gozoso de estar vivo...

Haciendo lo que estás haciendo...

Estando donde estás y viendo emerger

la perfección de este día.


Benditos sean aquellos que pueden ver la belleza...

La alegría y la armonía que está a su alrededor

y apreciarla plenamente,

y aquellos seres que reconocen en todo y en todos

y dan gracias por todo.


La alegría es como un guijarro

arrojado en el medio de un lago.

Las ondas que se generan van más y más

hacia los lugares más lejanos de la orilla

y luego retornan al centro...

llevando alegría a todo lo que tocan en el camino.


El Amor es como un bálsamo curativo...

cura todas las heridas... todos los daños...

todas las penas...


De modo que ama con Amor divino...

ama lo que es digno de amar

y lo que aparentemente no lo es.


Ama a aquellos seres que no conocen

el significado del Amor...

ama aún a los que por error llamas tus enemigos...

Cuando tu corazón esté colmado de Amor...

no conocerás enemigos.


El Amor es el cimiento de la vida.


Autor: Desconocido


Fuente:

http://www.shoshan.cl/tesoros2006/comienza_el_dia.html

Lago Moraine, Parque Nacional Banff, Canadá

Reflexión de Su Santidad Benedicto XVI sobre el Amor

Viernes 13 de Noviembre del 2009, Año Sacerdotal


Del Discurso del Santo Padre Benedicto XVI en la XXIII Jornada Mundial de la Juventud. Encuentro con los jóvenes de la Comunidad de Recuperación de la Universidad de Notre Dame. Sydney, Australia. Viernes 18 de julio del 2008.


El Amor auténtico es evidentemente algo bueno. Sin él, difícilmente valdría la pena vivir. El Amor satisface nuestras necesidades más profundas y, cuando amamos, somos más plenamente nosotros mismos, más plenamente humanos. Pero, qué fácil es transformar el Amor en una falsa divinidad. La gente piensa con frecuencia que está amando cuando en realidad tiende a poseer al otro o a manipularlo. A veces trata a los otros más como objetos para satisfacer sus propias necesidades que como personas dignas de amor y de aprecio. Qué fácil es ser engañado por tantas voces que, en nuestra sociedad, sostienen una visión permisiva de la sexualidad, sin tener en cuenta la modestia, el respeto de sí mismo o los valores morales que dignifican las relaciones humanas. Esto supone adorar a una falsa divinidad. En vez de dar la vida, trae la muerte.


(...) Hemos sido hechos para amar, para esto hemos sido hechos por el Creador. Lógicamente, no hablo de relaciones pasajeras y superficiales; hablo de Amor verdadero, del núcleo de la Enseñanza Moral de Jesús: “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente, con todo tu ser”, y “Amarás a tu prójimo como a ti mismo” (cf. Mc 13, 30-31). Éste es, por así decirlo, el programa grabado en el interior de cada persona, si tenemos la sabiduría y la generosidad de conformarnos a él, si estamos dispuestos a renunciar a nuestras preferencias para ponernos al servicio de los demás, y a dar la vida por el bien de los demás, y en primer lugar por Jesús, que nos amó y dio su vida por nosotros. Esto es lo que los hombres están llamados a hacer, y lo que quiere decir realmente estar “vivo”.


Queridos jóvenes amigos, el mensaje que os dirijo hoy es el mismo que Moisés pronunció hace tantos años: “elige la vida, y vivirás tú y tu descendencia amando al Señor tu Dios”. Que su Espíritu os guíe por el camino de la vida, obedeciendo sus Mandamientos, siguiendo sus Enseñanzas, abandonando las decisiones erróneas que sólo llevan a la muerte, y os comprometáis en la amistad con Jesús para toda la vida. Que con la Fuerza del Espíritu Santo elijáis la Vida y el Amor, y deis testimonio ante el mundo de la alegría que esto conlleva. Esta es mi Oración por cada uno de vosotros en esta Jornada Mundial de la Juventud. Que Dios os bendiga.


Fuente:

http://www.vatican.va/holy_father/benedict_xvi/speeches/2008/july/documents/hf_ben-xvi_spe_20080718_darlinghurst_sp.html


Benedicto XVI llega a Barangaroo con un

Grupo de jóvenes Católicos Australianos.

XXIII Jornada Mundial de la Juventud.

Jueves 17 de Julio del 2008.

Ámame como eres

Viernes 13 de Noviembre del 2009, Año Sacerdotal


Jesús nos anima diciéndonos:


No desconozco tu miseria,

veo las luchas y las tribulaciones de tu alma,

veo también tus enfermedades físicas

y el cansancio de tu cuerpo;

conozco bien tus pecados, tu infidelidad,

tus omisiones, tu vileza.

Yo te digo: ¡ ámame como eres !


Aunque caigas continuamente en tus mismas faltas,

aunque cometas esas culpas que no quisieras cometer,

aunque no cumplas con tu deber,

aunque desprecies a tu prójimo,

aunque tantas veces te consideres un villano.

Yo te digo: ¡ ámame como eres !


De todos los momentos de tu vida,

en cualquier situación en que te encuentres,

cuando tu alma esté llena de fervor,

cuando tu corazón sea árido, seco, empedernido,

incapaz de sentir y de amar.

Yo te digo: ¡ ámame como eres !


Si esperas ser un Santo, o un Ángel

para entregarte al amor, no me querrás nunca;

quiero que tu amor salga de lo profundo de tu miseria,

por eso, así te encuentres en la fidelidad

o en la infidelidad.

Yo te digo: ¡ ámame como eres !


Si me dices que no posees virtud y no tienes ciencia,

si estás privado de talento y vestido de andrajos,

si te sientes débil, indefenso, envilecido.

Yo te digo: ¡ ámame como eres !


Yo estoy a la puerta de tu corazón y llamo, ¡ ábreme !...

Déjame amarte, dame tu corazón,

te doy mi Gracia y el Pan Vivo

te doy la Fuerza para afrontar y superar

las dificultades de la vida,

te doy el Espíritu de Verdad y la Sabiduría del Amor,

te doy a mi Madre que te estrecha

contra su Corazón Inmaculado

no dudes de Mí , pero ten Fe.

Yo te digo ahora y siempre: ¡ ámame como eres !


Fuente:

http://www.geocities.com/jovenes_catolicos/amame_como_eres.html


Caridad ilimitada

Viernes 13 de Noviembre del 2009, Año Sacerdotal


Caridad ilimitada

Autor: Andrés Ocádiz Amador


Aristóteles en su gran búsqueda de la sabiduría, llegó a la conclusión de que «la virtud está en el medio». No se debe pecar ni por exceso ni por defecto. Así, el hombre valeroso no debe ser cobarde, pero tampoco temerario. Si se quiere ser virtuoso, hay que colocarse a la mitad.


Sin embargo, Cristo trajo ciertas modificaciones a la Teoría Aristotélica; modificaciones que, además, parecen ser contradicciones: morir para vivir, servir para ser el más importante, entre otras. Todas, claro está, vividas hasta el extremo, sin medianías. Quizá la más incomprensible de estas contradicciones sea: «haced el bien a quienes os hacen el mal y orad por vuestros enemigos». ¿ De verdad es posible cumplir esto ?


El 29 de Enero de 2006, se realizaron en Samarra (Irak) unos ataques contra dos Iglesias Cristianas, muriendo varios fieles. Semanas más tarde, se realizó un atentado por parte de grupos radicales Musulmanes contra una Mezquita Chií en Samarra. De la Mezquita sólo quedaron ruinas. La respuesta de los fieles Católicos sorprendió al mundo: comenzaron una campaña de recolección de fondos para ayudar a la reconstrucción de la Mezquita.


Mons. Paul Hinder, Vicario Apostólico de Arabia, celebró una Misa durante su Visita Pastoral a Mascate, Arabia Saudita. Durante la Oración de los fieles se hizo una Plegaria por el Sultán Kaboos. Estos Cristianos rezan por alguien no Cristiano cuando sólo a pocos kilómetros de Mascate, cruzando la frontera, llevar un Crucifijo podría significar pena de muerte debido a las leyes Islámicas.


¿ No se está exagerando según la Doctrina Aristotélica ? Según la Doctrina Aristotélica, sí; pero según la Doctrina de Cristo, no. Parece una locura lo que hacen estos Cristianos. Puede ser que lo sea pero, en todo caso, es una locura de Caridad. Porque lo que lleva a estas “locuras” no es, de ninguna manera, un motivo social, político o económico. Es únicamente la Caridad de Cristo que vive y se realiza en los corazones de todos estos Cristianos. Es el Ejemplo de su Maestro el que les da Fuerza. Tienen grabadas a fuego en el corazón las Palabras de Jesús: «en esto sabrán que sois mis discípulos».


Hace dos mil años un puñado de pescadores cambió un Imperio Romano que nadaba en intrigas y asesinatos. La gente escuchaba que los Cristianos eran enemigos del Estado porque eran criminales. Pero cuando los veían, sólo se podía decir de ellos: «¡ Mirad cómo se aman !». La Caridad era su única arma y con ella vencieron todo un Imperio que tenía legiones en todas sus fronteras.


Hoy debemos conquistar un nuevo imperio. Un imperio regido por el egoísmo, la indiferencia, el odio, las guerras, la avaricia. Y nuestra arma no será distinta; será, una vez más, la Caridad. El Papa ha lanzado un primer batallón de choque con su Encíclica “Deus Caritas est»”. Nosotros debemos comenzar la lucha cuerpo a cuerpo con quienes nos rodean. Sonreír a quien nos critica, saludar a quien nos guarda rencor, ayudar a quien nos pone trabas, perdonar a quien nos ofende. Éstas son las armas que debemos usar para vivir nuestra única Consigna: «amaos como yo os he amado». La victoria en esta batalla depende de nuestra acción, de mi acción. ¿ Qué voy a hacer hoy para vivir la Caridad con quien está a mi lado ?


¡ Vence el mal con el bien !


Fuente:

http://autorescatolicos.org/virtudesyvalores01.htm



Cita Bíblica preciosa sobre el Amor de Dios

Viernes 13 de Noviembre del 2009, Año Sacerdotal


«¿ Quién nos separará del Amor de Cristo ? ¿ La tribulación, o la angustia, o la persecución, o el hambre, o la desnudez, o el peligro, o la espada ?… Al contrario, en todas estas cosas estamos saliendo completamente victoriosos mediante el que nos amó. Porque estoy convencido de que ni muerte, ni vida, ni Ángeles, ni gobiernos, ni cosas aquí ahora, ni cosas por venir, ni poderes, ni altura, ni profundidad, ni ninguna otra creación podrá separarnos del Amor de Dios que está en Cristo Jesús nuestro Señor» (Romanos 8, 35-39).


Fuentes:

Santa Biblia

http://encontraradiosentodaslascosas.blogspot.com/2009/06/contemplacion-para-alcanzar-amor.html



El Amor

Viernes 13 de Noviembre del 2009, Año Sacerdotal


Querido Sacerdocio Real: Les agradezco mucho sus comentarios e interés en temas de provecho para el alma, motivo por el que hoy les traigo unas profundas reflexiones sobre el Amor que espero nos sirvan para amar cada día más a toda la humanidad, que aunque a veces nos cuesta mucho, hemos de partir del mismo Mandato de Jesucristo nuestro Señor: «Pero Yo os digo: Amad a vuestros enemigos y orad por los que os persiguen, para que seáis hijos de vuestro Padre, que está en los Cielos, que hace salir el sol sobre malos y buenos, y llueve sobre justos e injustos. Pues si amáis a los que os aman, ¿ qué merito tendréis ? ¿ No hacen eso también los publicanos ? Y si saludáis sólamente a vuestros hermanos, ¿ qué hacéis de más ? ¿ No hacen eso también los gentiles ? Sed, pues, perfectos, como Perfecto es vuestro Padre Celestial» (cf. San Mateo 5, 44-48).


Propongámonos amar más y más y más aún, con todas nuestras fuerzas «hasta que duela», como decía nuestra amada Madre Teresita de Calcuta, y agregaba que «si te duele es buena señal». También nos enseñó ella que «Cada obra de Amor, llevada a cabo con todo el corazón, siempre logrará acercar a la gente a Dios». Con estas palabras tan significativas que podemos meditar juntos, me despido deseándoles que experimenten intensamente el Amor de Dios en sus vidas, Irene



7/11/09

Oración Nº 4 del Año Sacerdotal: Por los Sacerdotes

Sábado 7 de Noviembre del 2009, Año Sacerdotal


Oh Jesús, te pido por tus Sacerdotes fieles y fervorosos;

por tus Sacerdotes que trabajan en sus países

o en Misiones en países lejanos;

por tus Sacerdotes desalentados,

por los que se encuentran sólos y tristes;

por tus Sacerdotes jóvenes y por los mayores;

por los que están enfermos y moribundos;

por el alma de los Sacerdotes que han muerto,

pero sobre todo te pido

por tus Sacerdotes muy queridos para mi.


El Sacerdote que me bautizó,

los Sacerdotes que han absuelto mis pecados

a través del Sacramento de la Reconciliación;

los Sacerdotes que me han dado Tu Cuerpo

y Tu Sangre por medio de la Comunión,

en las Misas a las cuales he asistido;

los Sacerdotes que me han enseñado e instruido;

todos los Sacerdotes con quienes

me siento obligado de una manera o de otra.


Oh Jesús, mantenlos a todos

muy cerca de tu Corazón,

y Bendícelos abundantemente

hoy y por toda una Eternidad.

Amén.


Fuente:

http://www.fcpeace.com/spanish/oraciones/peti_sacerdotes.htm



Oración Nº 3 del Año Sacerdotal: Por el Santo Padre

Sábado 7 de Noviembre del 2009, Año Sacerdotal


Señor, Fuente de Vida Eterna y Verdad,

dale a tu Pastor, el Papa, un espíritu

de coraje y juicio recto, un espíritu de

conocimiento y amor.


Que dirigiendo con fidelidad a todos

los que le has encomendado,

como sucesor del Apóstol Pedro

y Vicario de Cristo, transforme Tu

Iglesia en un sacramento de unidad,

amor y paz para todo el mundo.


Te lo pedimos a través de tu Hijo

Jesuscristo, nuestro Señor, que vive

y reina Contigo en unidad con el

Espíritu Santo, por los siglos de los siglos.

Amén.


Fuente:

http://www.fcpeace.com/spanish/oraciones/peti_santoPadre.htm



Oración Nº 2 del Año Sacerdotal: Oración del Sacerdote

Sábado 7 de Noviembre del 2009, Año Sacerdotal


Señor, Tú me has llamado al ministerio Sacerdotal
en un momento concreto de la historia en el que,
como en los primeros tiempos apostólicos,
quieres que todos los Cristianos,
y en modo especial los Sacerdotes,
seamos testigos de las Maravillas de Dios
y de la Fuerza de tu Espíritu.


Haz que también yo sea testigo

de la dignidad de la vida humana,
de la grandeza del amor
y del poder del ministerio recibido:
Todo ello con mi peculiar estilo de vida entregada a Ti
por amor, sólo por amor y por un amor más grande.


Haz que mi vida celibataria
sea la afirmación de un sí, gozoso y alegre,
que nace de la entrega a Ti
y de la dedicación total a los demás
al servicio de tu Iglesia.

Dame fuerza en mis flaquezas
y también agradecer mis victorias.


Madre, que dijiste el Sí más grande

y maravilloso de todos los tiempos,
que yo sepa convertir mi vida de cada día
en fuente de generosidad y entrega,
y junto a Ti, a los pies de las grandes cruces del mundo,
me asocie al Dolor Redentor de la Muerte de tu Hijo
para gozar con Él del Triunfo de la Resurrección
para la Vida Eterna.

Amén.


Fuente:

http://www.aciprensa.com/Oracion/sacerdote1.htm