Entrevista al Presbítero José Miguel
Larrosa Patiño de Paraguay
Domingo 23 de Mayo del 2010, Año Sacerdotal
Educar para la Vida, la Felicidad y la Santidad
9-05-2010
El Sacerdote Paraguayo José Miguel Larrosa Patiño estuvo recientemente de visita en el país para compartir con los Educadores de Religión los retos que la Quinta Conferencia del Episcopado en Aparecida plantea en el ámbito Educativo.
Larrosa es Secretario Ejecutivo de Pastoral Educativa en su país, y además, se desempeña como Profesor en el Instituto Teológico – Pastoral para América Latina de Colombia.
María Estela Monterrosa
mmonterrosa@elecocatolico.org
Se cuestiona cada vez con mayor fuerza la Educación Religiosa, pero ¿qué riqueza ofrece esta Área Formativa a nuestras sociedades modernas?
Para entender la importancia de la Educación Religiosa en las Escuelas debemos tener en cuenta que hoy el mundo se presenta con demasiadas situaciones en conflicto, en crisis; tenemos los retos de la posmodernidad que difícilmente podremos enfrentar y darles la respuesta adecuada, si no nos sentamos a dialogar todos juntos sobre el plano Educativo y de la Educación Religiosa; en especial para dar respuesta a las necesidades de la familia, de los niños y jóvenes, considerando que uno de los aspectos más urgentes hoy día es recuperar nuestra Vida afectiva y espiritual, que es lo que el mundo nos ha quitado. Sin una Educación Religiosa, sin una Educación en Valores, sin cuestionarnos sobre el tema de la Vida, si realmente descuidamos lo Espiritual, vamos en camino a convertirnos en personas quizás muy preparadas profesionalmente, pero vacías e incapaces de formar familias estables y de entrar en el mundo de la Justicia, la Solidaridad y la Equidad.
Un tribunal local desestimó recientemente la “Missio Canónica”, ¿qué orientaciones considera oportunas ante esta situación?
La Educación Católica y la Enseñanza de la Religión no se pueden desprender de la Jerarquía Católica. Desde mi punto de vista, sin querer entrar en lo que es propio de Costa Rica —que depende de lo que jurídicamente se pueda subsanar y del diálogo entre Iglesia y Estado— necesariamente cuando hablamos de Educación Religiosa en las Escuelas públicas, la Iglesia tiene que estar preservándola, cuidando la Formación de los Docentes y buscando que estos entiendan que ante todo van a las Escuelas como Cristianos, a ofrecer su Profesión de Educadores.
Usted habla de la importancia de ser primero Cristianos y luego Profesionales, ¿podría ampliarnos esa idea?
Hoy día tenemos un llamado desde la Misión Continental. El Documento de Aparecida presenta las realidades de nuestros países Latinoamericanos, y en ellas las propuestas y orientaciones podrían ser la salida a diversas situaciones que enfrentamos. Aparecida habla de recuperar nuestra identidad como Cristianos y nuestra condición de Bautizados; entender, desde ese punto de vista, que la Fe debe tener un proceso y que es ante todo un Encuentro con Cristo Resucitado. Esa Experiencia es la que tenemos que vivenciar, tener y portar. Si hay un entender desde Cristo, un sentir de nuestra fuerza interior para decir sí ante un Llamado de Cristo y de la Iglesia, entonces comprendemos que primero somos Cristianos Bautizados y por eso decimos sí a un trabajo dentro de la Misión Continental. En el caso de los Docentes en la Escuela o el ámbito en donde estén; ponemos nuestra Profesión al servicio de la Iglesia y de la Misión.
La Educación Católica lucha por defender su lugar, ¿qué nos dice Aparecida? ¿Cuáles son los retos?
Se ha visto la necesidad de promover la conversión de la Pastoral Educativa. Ésta exige nuevos directivos, nuevos Docentes y nuevas familias y, por tanto, una nueva Pastoral centrada en Jesucristo. Debemos recuperar esa identidad que hemos perdido y mirar nuestro contexto, los signos de los tiempos. Todo esto tiene como fin la Evangelización a través de la Educación: educar para la Vida, para ser feliz y para la Santidad.
Compartir en Costa Rica sus experiencias y las distintas situaciones nos ayudan en el planteamiento de revisión de los temas que puedan ser de interés a todos los países de América Latina.
Fuente:
http://www.elecocatolico.org/index2.php?pag=entrevista
Padre José Miguel
Larrosa Patiño
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