«MI PARROQUIA: Catedral
Metropolitana de San
José»
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Lunes 13 de Agosto del
Año del Señor 2012
MI
PARROQUIA: Catedral
Metropolitana
de San José
Costa
Rica, 24 Jun. 12 (Eco Católico)
Laura
ávila Chacón
lavila@elecocatolico.org
La palabra
Catedral proviene del Latín Cathedra, que significa silla o trono, y se refiere
al lugar propio del Obispo, es decir, la Cátedra.
Entre los Templos
de las Diócesis, el lugar más importante corresponde a la Iglesia Catedral, que
es signo de unidad de la Iglesia particular y lugar donde acontece el momento
más alto de la Vida de la Diócesis, porque es en ella donde el Obispo preside
la Liturgia, santifica a las personas y rinde Culto para la Gloria de Dios.
La Catedral
es signo del Magisterio y de la Potestad del Pastor de la Diócesis, como signo
de Unidad de los creyentes en aquella Fe, que el Obispo anuncia como Pastor de
la grey.
En nuestro
país, dicha riqueza se contiene, en el caso de la Arquidiócesis de San José, en
la Catedral Metropolitana, Sede de la Cátedra del actual Arzobispo de San José
Monseñor Hugo Barrantes Ureña.
Sus
particularidades son tales, que no es correcto compararla con una Parroquia
más. La Catedral no posee Filiales y es regentada por un Prefecto quien se
encarga de que se desempeñen debidamente los Servicios Pastorales y Litúrgicos
de la Catedral. En este caso, dicha responsabilidad recae en el Sacerdote
Francisco Javier Mata Granados.
Junto a él
están los Miembros del Venerable Cabildo Metropolitano, un Cuerpo Colegiado de Sacerdotes
que brindan el mantenimiento, la promoción de la ejecución del Culto de la
Iglesia, la parte Litúrgica y Ceremonial, como una responsabilidad Pastoral.
Corazón de la capital
La
Catedral Metropolitana es, por su Historia, Significado y Ubicación geográfica,
el corazón de nuestra ciudad capital.
Con su
imponente arquitectura, recibe con las Puertas abiertas a quienes, en medio del
bullicio, necesitan un espacio de silencio para el encuentro con Dios.
En ella se
encuentran armonizados el pasado, el presente y el futuro de la Fe Católica del
pueblo Costarricense, constituyéndose un referente obligatorio en los grandes
momentos de la Historia nacional.
La
Catedral Metropolitana es, por ello, expresión de la Devoción de los Costarricenses,
su Amor a Dios y su adhesión a la Iglesia de Cristo.
Dicha
identificación quedó más que demostrada en el último Proceso de restauración
total al que fue sometido el Templo, para rescatarlo de los daños ocasionados
por los sismos y el paso del tiempo.
Dicha
intervención asegura que la Catedral Metropolitana siga siendo un Faro Espiritual
en medio de la ciudad por muchos años más.
Arte Católico
Coadyuvante
a su faceta celebrativa trascendente, la Catedral Metropolitana no puede
comprenderse sin sus riquísimas expresiones de Arte Sacro, desde su magnífico
órgano tubular, hasta sus vitrales, cuadros, campanas, imágenes, pisos, criptas
y bóvedas.
Sus
vitrales por ejemplo llegaron a Costa Rica a inicios del siglo XX procedentes
de París. Son 17 piezas de gran valor artístico creadas mediante una antigua
técnica denominada vidrio de color a la grisalla (fundición a 700 grados
centígrados), con bordes emplomados, colocados en las paredes laterales.
En cuanto
a imágenes destinadas al Culto, en su mayoría fueron traídas desde Guatemala y
España en tiempos de la Colonia. Destaca el Cristo del Santo Sepulcro, situado
al lado de la Capilla del Sagrario, Obra del escultor Manuel María Zúñiga,
quien originalmente la creó para un Crucifijo, pero luego fue transformada en
un Cristo Yacente.
Se
encuentran además la Imagen de la Inmaculada Concepción, el Sagrado Corazón de
Jesús y San José, traídas por iniciativa del III Obispo de Costa Rica Monseñor
Juan Gaspar Stork.
Equipo Sacerdotal
Pbro. Francisco
Javier Mata Granados.
Prefecto.
Ordenado
el 22 de Diciembre de 1962.
Datos generales
Misas:
Lunes a
Sábado: 6:30, 8 y 11 a.m. y 5 p.m.
Domingo:
7, 9 y 10:30 a.m. /12:00 m.d, 4, 6 y 8 p.m.
Confesiones:
Lunes a
Viernes excepto Miércoles: 9 a 10:30 a.m.
Martes y
Jueves: 3 a 4:30 p.m.
Historia
El 17 de Abril
de 1878 se realizó la Bendición de la Catedral de San José a cargo del
Administrador Apostólico, Mons Luigi Bruschetti, Delegado del Papa León XIII.
Diez años
más tarde (1888) un terremoto afectó la estructura del Templo por lo que fue
necesario demoler los campanarios de mampostería y sustituirlos por torres
metálicas importadas desde Bélgica, que estuvieron durante 100 años sobre la
fachada principal.
Casi cien
años después, dos terremotos (1990 y 1991), obligaron a hacer trabajos de
reforzamiento de prácticamente toda la Catedral. La situación permitió
reconstruir, en concreto, los campanarios originales, recuperando la fidelidad
de los detalles ornamentales. Los techos de lámina de las antiguas torres se
sustituyeron por cúpulas.
Fuente:
http://www.elecocatolico.org/index2.php?pag=miparroquia
Hermosísima Catedral
Metropolitana
de San José, Costa Rica